martes, 25 de marzo de 2014

Tertulia de actualidad

He venido a España a pasar unos días (siete, para ser precisos), llegando al aeropuerto Madrid-Barajas y saliendo de Madrid-Barajas-Adolfo Suárez-De todos los santos. No digo que este hombre no se mereciera todos los homenajes "a título póstumo" pero suena mucho mejor JFK que el nuevo Barajas, sinceramente.

Si encendéis el televisor podréis ver muchas imágenes de gente de negro, gente llorando, gente agachando la cabeza, gente haciendo cola que ni para Justin Bieber, periodistas en pleno capítulo de Cuéntame, etc. Pero yo vengo a ofreceros la retransmisión de la capilla ardiente de Adolfo Suárez desde la casa de los abuelos Filo (alrededor de la mesa camilla con el brasero puesto), que no son otros que mis abuelos maternos.

Aportaciones de la Abuela Filo ( "A mí es que lo dulce no..." o "Te doy mi verdad")
Pues tiene un yerno negro.
Mira Laura, mira a la reina. Hay que ver, por ahí la sacan guapa, pero la verdad es que está muy fea.
La Elena, qué fea es.
Felipe se santigua, la Letizia no. La hija pequeña es igualita que ella.
Aznar, mira que es feo.

Aportaciones del Abuelo Filo ("Ahora hija coges el autobús para volver, eh" o "Ay mi niña"):
Al negro no lo enfocan.

Discusión de los Abuelos Filo:
La gente espera hasta siete horas de cola para rendir su homenaje al presidente de la transición.
Abuelo Filo: Anda que iba a esperar yo siete horas.
Abuela Filo: Bueno, hombre, cada uno que haga lo que quiera.
Abuelo Filo: Siete horas ahí para ver una caja, anda ya.
Abuela Filo: Pues cuando el hambre bien que esperábamos ahí en el mercado a que nos dieran la comida, que íbamos a la una de la mañana... (Goya para mi abuela ya, por guión original)
Abuelo Filo: ¡Es que si es para comer como si hay que esperar un día!
Abuela Filo: Pues sus hijos bien orgullosos que estarán. Además, si tú no pasabas hambre.
Etc. 
Yo soy de la opinión de mi abuelo, ¿vosotros?

Por mi parte, cuando vi esta imagen (centro):
lo primero que pensé fue que qué hacía Fernando Romay a la puerta con los príncipes. Hasta que ya me di cuenta que no podía ser él, porque era más bajo que Felipe. 


jueves, 20 de marzo de 2014

Cuándo mola ser niñera...

  1. Cuando te dicen "thank you nanny/Laura".
  2. Cuando se quedan dormidos mientras les hablas suave para que no tengan pesadillas.
  3. Cuando te dicen que los trucos para no tener pesadillas han funcionado.
  4. Cuando se ríen contigo.
  5. Cuando te dejan jugar con ellos a la Wii.
  6. Cuando te dan la mano.
  7. Cuando te invitan a jugar con ellos.
  8. Cuando te abrazan.
  9. Cuando te dicen "you're the best nanny/Laura ever". Y en este caso es más chachi porque Lauras hay a puñados.
  10. Cuando te dicen que te llevarían en su viaje a América.
  11. Cuando se despiden de ti desde la ventana.
  12. Cuando crees que no saben español y te dicen "adiós amigo".
  13. Cuando te preguntan cómo se dice "Christmas" en español y lo pronuncias tan mal que ellos dicen "Navidá".
  14. Cuando te dicen "I hope you have nice dreams too... Just for once."
  15. Cuando les prometes comer helado y sonríen.
  16. Cuando son felices con cosas pequeñas.
  17. Cuando te piden que hagas el ruido de la sierra.
  18. Cuando dejas de ser un adulto egoísta e impaciente y empiezas a valorar las cosas que te ofrecen los enanos.

miércoles, 12 de marzo de 2014

Y sentirte como en casa

Diccionario básico e internacional "testigo de Jorobar/Español". Que aquí pongo español pero ya os digo que vale para cualquier idioma. 
No=sí.
Sí=no.
Esto es lo básico. A partir de aquí al testigo se le enciende el piloto automático y da igual lo que le digas, que va a entender lo que le dé la gana. Como una madre en el pasillo de los dulces del supermercado o una abuela sirviendo la comida a un nieto que ya no puede más.

No me interesa=Cuéntame más
De verdad que no me interesa=Por favor, insiste
Vete a la mierda=Vuelve a insistir mañana
No vuelvas más=Ven otra vez mañana, que te invito a merendar
No soy creyente, no me interesan las religiones=¿Pero no se ha dado cuenta de todo el dinero que puede ahorr... Uy, esto no, pero casi.

¿Qué solución nos queda? Cerrar la puerta y comprar un videoportero (y avisar a tu madre de que si un señor mayor pregunta por ti es bastante probable que no sea un amigo o un novio porque, de momento, no eres gerontófila) o echar a correr huyendo de tu compañero de clase Markus, conocido también como "el pesao".

lunes, 10 de marzo de 2014

"Laurina", de Joyce o "Una tontada de entrada"

He pasado la tarde -mediodía para los mortales hispanos- en una hamaca, leyendo. Oh, mundo cruel. Leyendo y reflexionando sobre cómo estar tumbada disimula la barriguilla y exagera los muslámenes.

Y que en el instituto se me diese mal la Filosofía...

Que conste que me he visto obligada a salir al jardín, porque los niños estaban jugando fuera. No es que haya disfrutado del aire fresco y la luz del sol, balanceándome suavemente. No. No vayamos a confundirnos.

Oficialmente ha llegado la primavera. No sé si ya es para quedarse o solo por unos días, pero mola. Solo lo empaña el hecho de no tener gafas de sol y guiñar más que un guitarrista de orquesta ligando con veraneantes. 

Ahora mismo estoy mirando gafas por internet y convirtiendo el precio en billetes de avión. Por ejemplo, unas Ray Ban valen billete de ida y vuelta y un poco. No compensa ir molona. Paso, muy caras.

Es mucho más fácil hacer esta conversión que la de las pesetas. Se lo tengo que contar a mi abuela, que la mujer no se apaña con la "nueva" moneda. Que parece que fue ayer y han pasado 12 años, madredelamorhermoso. Era mi primer año de instituto y mi padre compró aquella bolsa de 2000 ptas./ 12 euros. Y yo empecé a coleccionar euros de otros países hasta que el mono de dulces para el recreo pudo más que la curiosidad. Tengo una amiga que colecciona fotos de monedas, chica lista.

Los niños están jugando con palos, si dejo de escribir de repente es porque alguno se ha hecho cíclope. La verdad es que si voy a ser despedida por daños en infantes que sea esta semana o la próxima, que tengo billetes para el 22 de marzo.

Y no sueltan los palos, los jodíos. Masco la tragedia, sabe a menta. Como cuando se oye mucho jaja y de repente te llega un llanto. Como cuando empiezas comiendo una rebanadita de pan con Nutella y acabas con el bote a cucharadas.

Una cosa buena que tiene cuidar a niños que no hablan tu idioma, además de que no entiendan los redioses, es que puedes desconectar a la mínima. Ni "habla chucho que no te escucho" ni nada. Simplemente pones el piloto automático y se acabó. Anda que no me he dado paseos a la escuela con el "aham, aham, yeah".

Vale, el pequeño acaba de decir "that's what nanny meant about 'be careful'". Si es que las madres, la DGT, las Autoridades Sanitarias y las nannys siempre tenemos la razón. Les he dicho que no más palos y ya se me ha mosqueado el mayor. Que "no more funny outside", dice. Hasta que descubra las discotecas, supongo. Aunque no todo son ventajas, os digo que no hay nada como echar la bronca en tu idioma.

Estoy viendo la parodia de Buenafuente de las Flos Mariae. Ilustro:
Manda narices, no me entero de las noticias serias porque "estoy fuera de España" pero de la tontería de turno no me libro. La de rosa tiene la culpa de que se pierdan, he de decir.

Hasta la próxima conexión.

domingo, 9 de marzo de 2014

Heidelberg, qué hermoso eres

8 de marzo de 2014

Hoy me desperté a las 4:30 -muchas gracias, reloj biológico, por ahorrarme escuchar al despertador pedorro- así que me van a perdonar ustedes que no me explaye mucho. Pero os voy a poner unas cuantas fotos como compensación. 

Sin más dilación, vamos que nos vamos con el viaje a Heidelberg que, si no llega a ser por mi compañera de viaje, sería "el muy barato e inesperado viaje a Zurich".

Salimos a las 7:00 de la Jaupbanjof de Frankfurt del Memo. En el viaje no pasó nada interesante, que si una se duerme, la otra lee, etc. Solo a eso de las ocho una mochila dijo "paren el mundo que yo me bajo" y se cayó del ¿maletero? en una curva.

Llegamos sobre las 8:30 a nuestro destino. A una estación sin nombre, que ya me dirán dónde se ha visto eso, a ver. Son ganas de poner las cosas difíciles.

Allí nos encontramos esta inquietante imagen: 
Colega, ¿dónde está mi bici?
La relación de los alemanes con las bicicletas no es normal, definitivamente. No es ya que vayan con ella a todos lados, es que sienten su fuerza. Si no, ya me diréis cómo una persona humana mamífera va a encontrar nada en semejante mogollón.

Después: café, información, mapa, encontramos el casco antiguo. Nos maravillamos con su belleza. Foto, foto, foto. Qué bonito el puente, ay mira los candados del amor, joé cuánto chino, vamos al castillo. Vueltas, vueltas, vueltas. Caminar. Comer. Helado. Río. Vuelta al bus. Frankfurt. Casa. Sueño.

"Sean ustedes muy bienvenidos a mi humilde morada"
"Menú del día, bueno, rico, barato"

Se me ha pinchado la colchoneta
Pisos de nueva construcción
Fernando Ampelmann de todos los Santos
Miley Cyrus, eres una loser
El saber os hará libres. O no.

Foto hecha sin querer. Muy artística.

Instrucciones para cocinar perro en el microondas.
Jesús cae por segunda vez sobre la tierra, también conocido como: Jesús el patoso

jueves, 6 de marzo de 2014

Desmontando Alemania: bienvenidos a Impacienlandia

Dos cosas ciertas hay en la vida: uno, la conexión güifi de esta casa no llega bien a la cocina; y dos, los alemanes son impacientes que te cagas*.

Todo aquello que me hace verlos como maleducados y que rompe con la idea que tenía de ellos se explica con la impaciencia:
  • La cajera te mira y espera con la mano abierta -no en posición de guantá, por lo menos- mientras buscas el dinero, por la impaciencia. Cualquier día una se arranca y me saca el dinero ella misma.
  • Usan el móvil mientras conducen, por la impaciencia. Que alguno me dirá "eso pasa en todos los países". Sí, cierto, pero aquí lo veo muy a menudo y se supone que son muy fieles a las normas. Juas.
  • No respetan eso de "pasen por esta caja en orden de fila", por la impaciencia.
  • No respetan eso de "se deja salir antes de entrar", por la impaciencia. Cuando en España alguien se cuela en el bus es muy frecuente que el pueblo se una como los de Fuenteovejuna -change.org para los modernos-  y empiecen a soltar improperios. Aquí es un "ahí te las apañes como puedas, voy a lo mío".
  • Te gritan "Achtung, Achtung!" para que te quites del camino, por la impaciencia. Cuando les oigo decir el "disculpa" lloro por dentro. Bueno, por la impaciencia y porque son un poco gilipollas.
  • Creen que los lugares públicos son para estar en silencio, por la imp... Oh. Vaya, igual es por la gilipollez congénita. Suerte que no la tienen todos.
  • Te dicen lo que se les pasa por la cabeza- típica confusión de "sinceridad/mala educación/no me des tu opinión si no te la pido"- por la impaciencia, seguro. La impaciencia de tener que improvisar algo cuando acaban antes soltando las verdades como puños.
  • Prefieren no esforzarse en hablar alemán más despacio e ignorarte/hablar inglés directamente, por la impaciencia.
Unsobaita.

Así que si quieres acabar con un alemán y ver cómo le estalla la cabeza, una de dos: le enseñas tu DNI y le dices que adivine cuál es tu nombre y cuáles son tus apellidos y que encuentre la fecha de expedición; o le haces esperar. No falla. Palabra de girlscout.

*Freud, si estás leyendo esto NO QUIERO TU OPINIÓN. No me seas alemán.

lunes, 3 de marzo de 2014

La canción más triste del mundo

Feliz en tu día es, sin duda, la canción más triste del mundo. Se la pones a un guiri que no tenga ni idea de español y no creo que piense que sea una canción de cumpleaños.
Feliz, feliz en tu día
Por ahora vamos bien, ritmo aparte
amiguito que Dios te bendiga
Gracias, Ned Flanders, pero espero que eso no signifique que no hay regalos
que reine la paz en tu día
¿Paz? ¡Yo no quiero paz! Yo quiero quemar las calles y el Burger King
y que cumplas muchos más.
Y que tú lo veas, ya. Que no hay regalo.

Cuando estaba en el colegio y cantaban eso, es que hasta se me ponía mal cuerpo. Menos mal que me solía librar porque mi cumpleaños coincidía con las vacaciones de Navidad.

Aunque tampoco es que el internacional Cumpleaños feliz sea el colmo de la alegría y la originalidad. Solo lo salvo por dos cosas: por el desafine general en el te deseamos todos y por la confusión cuando unos dicen te deseamos todos y otros, te deseamos Paquito. Por lo demás, vaya churro.

En alemán es más de lo mismo, solo que en lugar de feliz cumpleaños te desean buena suerte. ¿Buena suerte por qué? ¿Qué va a salir de la tarta? ¿Qué me habéis comprado, malditos?

Pero siempre nos quedarán los cumpleaños fatal o happy birthday to you, you live in a shoe, you look like a poo and you smell like it too. Eso, y la canción portuguesa, que es -al menos de las que conozco- la más currada y original:
Bueno, también sacan a relucir a Dios, pero por lo menos no se limitan a repetir una y otra vez la misma frase.

domingo, 2 de marzo de 2014

Cabalgata de los Reyes Magos de Bilbao

Helau!!

Hoy he ido a la cabalgata de los Reyes Magos de Bilbao. Pero sin avión ni nada -ni Reyes Magos, pero eso es una minucia-,con el S-Bahn, que es el tren que no va subterráneo. Porque ese es el U-Bahn, aunque luego resulta que el U va también por encima de la tierra y que el S en Frankfurt-Hb tiene la parada subterránea. No entiendo .

Algunos lo llamarán "Desfile de Carnaval de Oberursel", pero no, es el desfile de Navidad de Bilbao, porque ya sabemos que ellos nacen donde quieren y celebran como les da la gana, Patxi. Y tengo pruebas fotográficas.

La primera es que la gente hablaba un idioma raro, que no entendía. Y todos sabemos que yo en alemán ya soy una experta, así que esa es una clara señal de que no era Alemania.

La segunda, había una carroza de Navidad, y de nuevo todos sabemos que los alemanes soy muy rectos y no van a poner algo de Navidad fuera de fecha.
Me van a perdonar la calidad de las fotos, pero me hicieron según la norma ISO-1987 siguiendo el estándar español.
Que soy baja, vaya.
Y la tercera y más clara, la gente no hacía más que repetir la palabra "Helau". "¿Qué queremos? ¡Helauuuuuuu!". Incluso los de una carroza arrojaron helados, pero no llegué a interceptar ninguno. Justo el más cercano le fue a caer a una señora ¡que encima no lo quería! Será perra... 


Además, algunas carrozas tiraban fruta. Sí, fruta. Naranjas, plátanos, manzanas... A mí eso solo me parece posible en Euskadi. Porque, ¿qué otras cabezas podrían soportar un manzanazo? Que hoy me he llevado caramelazos y han dolido, no quiero pensar cómo será un frutazo.

Bueno, vale, sí, me habéis pillado. Era el Carnaval de Oberursel. Pero es que eso se parecía mucho al día de Reyes.  Eso sí, aunque aquí la lucha por el caramelo era igual de sangrienta, no había paraguas del revés. Y eso que aquí los caramelos no son de la Cajen de Ahorren Alemanen, no, de marquita. Haribo y demás.
Mi Emilio Botín. Un premio para quien encuentre el euro.
No tiraban euros, me lo encontré por la calle. Conste.
Realmente ha sido una tarde agradable, a pesar de que se me quedaron los pies como dos témpanos de hielo. Admiro de los alemanes su falta de sentido del ridículo (ya podríamos aprender los españoles) pero no su incapacidad para hacer la ola. Que no saben, ¡no saben!

Ah, y para que os quedéis tranquilos, sonó la Macarena. Arsa. Bueno, en inglés. Aunque dicen "vitorino" y yo me río igual.

sábado, 1 de marzo de 2014

Pipas, atún y quiscos

Es ist ein hartes Brot.

Ayer fue un día malo, bastante malo. Se me cruzó en la vida una profesora con todo lo peor de los alemanes. Me soltó varias perlas -porque se ve que nació con el filtro roto y la teoría de la mente caducada- y me dejó hecha una braga. Resultado: dolor de cabeza, que sumado al cansancio se convirtió en siesta. La siesta no me gusta porque no me sienta bien. 

Efectivamente, cuando me desperté de la siesta no me encontraba mejor, así que a pesar de haber abierto la página de blogger y elegido un tema, no escribí nada. Os perdono, de nuevo.

Una de las cosas que echo de menos aquí es la posibilidad de picar algo que no sea dulce y que sea realmente picoteo. Es decir, no quiero meterme entre pecho y espalda un bocadillo con pepino y salami, señor alemán, pero igual una croqueta, una tortillita o algo así, sí. Vamos, que echo de menos las tapas. Olé, arsa, jaleo, arriquitaun. Tópico que se cumple.

Aquí, cuando te da el gusanillo, o vas a una cafetería o a un supermercado/droguería. Porque, amigos, no hay quioscos. Ya que no tienen tapas pues oye, un quisco, y me compro unas pipas o unas patatas. Pues no. Pero no es solo algo de Alemania, en Portugal tampoco hay quiscos. O no los había cuando yo vivía allí. Solo teníamos un Belros en el centro comercial y ya.

Es que le quitan todo el encanto a la compra de dulces. Todo tiene que ser en bolsas grandes, no puedes montarte tu propio festival de azúcar y caries. 

Lo que sí que tienen aquí, y en Portugal no -fíjate cómo son las cosas-, son pipas. Todo gracias a los turcos (es mi teoría). Porque compartimos muchas cosas con ese pueblo, por lo que veo. Como los encurtidos o, como digo, las pipas. Antes de ayer me compré un bolsón cerrado en una tienda de especialidades turcas, griegas, etc. Allí también encontré atún en tomate (ejpañó). 

El consumo de pescado en Alemania es ridículo. Porque tampoco hay pescaderías. La sección de pescado de los supermercados, si la hay, es canija, y abundan los marinados. Que a esta gente le gusta más un condimento que a mí Colin Firth. 

Vale que estoy en Hessen, un poquito lejos del mar, pero en España vivo en Salamanca y tampoco es que estemos en primera línea de playa.

Otras cosas que no he encontrado/no son tan comunes, además de las cosas típicas como el Cola Cao y demás, han sido: productos específicos de limpieza de vitrocerámicas, trapos de cocina que no sean impermeables, pan tostado QUE NO SEA DULCE o té rojo. 

Bueno, bueno, y si nos ponemos a hablar de higiene femenina... Un desastre.

Ahora, productos ecológicos, veganos, ecológicos y veganos, para hacer dulces, para decorar o tipos de pan; todos los que quieras. Me confieso enamorada del pan, aunque aquí hay barras que cuestan del euro para arriba, que hasta las he visto por dos euros y pico. ¿Estamos locos?

Y encima el agua es con gas. Y si no, sabe a agua con gas pero sin gas. Y no, no me vale como compensación que al chorizo lo llamen chorizo.

P.D: se me olvidaba el tomate frito, otro gran olvidado fuera del país de la peseta.